Hoy es día de reflexión de las elecciones europeas, así que vamos a reflexionar. En ideas breves.
En primer lugar, demos algunos datos: cerca del 80% de las leyes aprobadas en los parlamentos nacionales provienen directamente de Bruselas (mediante trasposición de Directivas, aplicación de Reglamentos, etc...). Además, hay que recordar que, en base a la Constitución y al Código civil patrio, las leyes comunitarias son de aplicación directa en España, así como los tratados y convenios internacionales ratificados por nuestro país.
A ello, añádanle el dato de que en el Parlamento europeo, lejos de la imagen esa de radical rivalidad, en un 70% de las ocasiones el PP y PSOE votan exactamente lo mismo.
Y si encima usted corre la mala suerte de ser católico, se encontrará con que en materias irrenunciables para cualquier católico, el PP y el PSOE no muestras diferencias sustanciales. Los medianamente informados recordarán que el Papa escribió en Sacramentum Caritatis de los cuatro principios "no negociables": la vida, la familia, la libertad de educación y el bien común. "No negociable" significa que ni siquiera en base a una mal entendida "aconfesionalidad" (o una mayoría social) un católico debe pasar por alto estos principios (recordemos aquí el apoyo expreso que el PP ha hecho de la ley del aborto que el Constitucional declaró como tal en 1985, o del divorcio, o del contenido de las uniones homosexuales).
¿Han visto ustedes la última película de Viggo Mortensen? la de "good". Pues me pareció que ese hombre bueno que representa Mortensen podría ser cualquier pepero. Persona buena, con nobles intenciones, contrario a la aberración dominante. Como Viggo, ese pepero sería contrario al nazismo, sería amigo del pobre judío y cuida de su pobre madre senil y su pobre familia. Pero no es un "radical", no señor. Él actúa siempre con su conciencia intacta. Si colabora con los nazis no es por afinidad (salvo una cuestión relativa a la Vida), sino por sentido de "responsabilidad", para salir adelante, por supuesto y para "cambiar las cosas desde dentro". En fin, no les cuento qué ocurre al final ni con Viggo ni con su amigo judío... ni con el PP ni con España.
En fin, el Arzobispo de Pamplona y Tudela, en marzo de 2007 dio una conferencia en la que, más detalladamente, decía cosas muy interesantes, como que esos partidos que quieren ser fieles a la Doctrina Social de la Iglesia son minoritarios, sí, pero que podrían llegar a interesantes alianzas, de conseguir suficiente apoyo católico y que, en todo caso, tales partidos serían "dignos de apoyo".
En estas elecciones, partidos potables que respeten los principios "no negociables" hay unos pocos: los hay de "izquierdas", como SAIn (Solidaridad y autogestión internacionalista), hay monotemáticos, como FyV (Familia y Vida) y otros considerados de "derechas", como AES (Alternativa Española). Hay alguno más, pero los que más he considerado son estos tres.
A falta de otra formación que no se presente, he decidido dar mi voto a Alternativa Española. Según he visto, los de Familia y Vida se han pasado de la raya con eso de la "aconfesionalidad" y en sus mensajes pecan, para mí, de un exceso de "naturalismo" ya desfasado que, como el toro falto de bravura saca a relucir su (mal) genio, acaba por embestir a los partidos que sí hablan sin complejos absurdos de Dios y la Iglesia. Además, algunos ataques personales y bajos que su líder ha proferido contra López-Diéguez (candidato de AES) me han echado para atrás definitivamente, y eso que alguna vez les he votado. Los de SAIn, pues no me convence su internacionalismo sin fronteras y casi sin patrias. Y AES, es quien más se aproxima a mi forma de ver las cosas. Defensa firme de la Vida, la familia, la educación, el bien común, combate la xenofobia de otros partidos (por si quedaba alguna duda), el poner a la persona en el centro de la actuación política más el hecho de tener un programa amplio y completo (y aceptable) que proponer a la sociedad española y europea en general, es lo que me ha hecho decantarme de forma final.
Y aquí, estos vídeos:
Y éste, más informal:
En primer lugar, demos algunos datos: cerca del 80% de las leyes aprobadas en los parlamentos nacionales provienen directamente de Bruselas (mediante trasposición de Directivas, aplicación de Reglamentos, etc...). Además, hay que recordar que, en base a la Constitución y al Código civil patrio, las leyes comunitarias son de aplicación directa en España, así como los tratados y convenios internacionales ratificados por nuestro país.
A ello, añádanle el dato de que en el Parlamento europeo, lejos de la imagen esa de radical rivalidad, en un 70% de las ocasiones el PP y PSOE votan exactamente lo mismo.
Y si encima usted corre la mala suerte de ser católico, se encontrará con que en materias irrenunciables para cualquier católico, el PP y el PSOE no muestras diferencias sustanciales. Los medianamente informados recordarán que el Papa escribió en Sacramentum Caritatis de los cuatro principios "no negociables": la vida, la familia, la libertad de educación y el bien común. "No negociable" significa que ni siquiera en base a una mal entendida "aconfesionalidad" (o una mayoría social) un católico debe pasar por alto estos principios (recordemos aquí el apoyo expreso que el PP ha hecho de la ley del aborto que el Constitucional declaró como tal en 1985, o del divorcio, o del contenido de las uniones homosexuales).
¿Han visto ustedes la última película de Viggo Mortensen? la de "good". Pues me pareció que ese hombre bueno que representa Mortensen podría ser cualquier pepero. Persona buena, con nobles intenciones, contrario a la aberración dominante. Como Viggo, ese pepero sería contrario al nazismo, sería amigo del pobre judío y cuida de su pobre madre senil y su pobre familia. Pero no es un "radical", no señor. Él actúa siempre con su conciencia intacta. Si colabora con los nazis no es por afinidad (salvo una cuestión relativa a la Vida), sino por sentido de "responsabilidad", para salir adelante, por supuesto y para "cambiar las cosas desde dentro". En fin, no les cuento qué ocurre al final ni con Viggo ni con su amigo judío... ni con el PP ni con España.
En fin, el Arzobispo de Pamplona y Tudela, en marzo de 2007 dio una conferencia en la que, más detalladamente, decía cosas muy interesantes, como que esos partidos que quieren ser fieles a la Doctrina Social de la Iglesia son minoritarios, sí, pero que podrían llegar a interesantes alianzas, de conseguir suficiente apoyo católico y que, en todo caso, tales partidos serían "dignos de apoyo".
En estas elecciones, partidos potables que respeten los principios "no negociables" hay unos pocos: los hay de "izquierdas", como SAIn (Solidaridad y autogestión internacionalista), hay monotemáticos, como FyV (Familia y Vida) y otros considerados de "derechas", como AES (Alternativa Española). Hay alguno más, pero los que más he considerado son estos tres.
A falta de otra formación que no se presente, he decidido dar mi voto a Alternativa Española. Según he visto, los de Familia y Vida se han pasado de la raya con eso de la "aconfesionalidad" y en sus mensajes pecan, para mí, de un exceso de "naturalismo" ya desfasado que, como el toro falto de bravura saca a relucir su (mal) genio, acaba por embestir a los partidos que sí hablan sin complejos absurdos de Dios y la Iglesia. Además, algunos ataques personales y bajos que su líder ha proferido contra López-Diéguez (candidato de AES) me han echado para atrás definitivamente, y eso que alguna vez les he votado. Los de SAIn, pues no me convence su internacionalismo sin fronteras y casi sin patrias. Y AES, es quien más se aproxima a mi forma de ver las cosas. Defensa firme de la Vida, la familia, la educación, el bien común, combate la xenofobia de otros partidos (por si quedaba alguna duda), el poner a la persona en el centro de la actuación política más el hecho de tener un programa amplio y completo (y aceptable) que proponer a la sociedad española y europea en general, es lo que me ha hecho decantarme de forma final.
Y aquí, estos vídeos:
Y éste, más informal:
3 comentarios:
Sí, yo también me decanté a favor de AES por esos motuvos que tú apuntas y algunos otros que he explicado en mi Blog.
Definitivamente la opción católica, nacional, y decente es AES.
Lo mismo digo.
Un saludo.
Gracias a los dos por comentar. La verdad es que le he dado muchísimas vueltas y sí, al final AES es la opción para estas elecciones. Mañana Dios dirá.
Saludos
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